Tú eliges a qué dedicas tu tiempo. Si hay algo que te gustaría hacer pero dices que no tienes tiempo, es porque está en los últimos puestos de tu lista de prioridades. Tal vez dices que no tienes tiempo para ir al gimnasio. Dices que te gustaría ir pero dedicas el tiempo a otras actividades, no necesariamente más importantes. Puede que pases mucho tiempo en redes sociales, o visualizando vídeos en Youtube, o series en Netflix. Seguramente esto no va a cambiar mucho tu vida. Sería más provechoso, si tienes un trabajo en el que te mueves poco y llevas una vida sedentaria, ir al gimnasio. Tal vez hacer crossfit
No hace falta que sea mucho tiempo a la semana. Simplemente por salud. Si no vas al gimnasio, al menos puedes caminar. Si no hace buen tiempo, puedes caminar en una cinta.
Ocupación como excusa
Hay personas que buscan deliberadamente estar muy ocupadas, y no precisamente con actividades provechosas. Es la excusa perfecta para no hacer cosas más importantes. Para postergar una y otra vez tareas que requieren gran dedicación. Se dejan llevar por la pereza y lo justifican diciendo que están muy ocupadas.
Nuevos planteamientos
Busca un tiempo para reflexionar y piensa si debes cambiar tu lista de prioridades. Tal vez estás poco a poco, sin darte cuenta, abandonando a tus amigos por buscar ocupaciones que no te aportan mucho.
Puede que vivas en una casa en la que no te sientes cómodo y retrasas continuamente la búsqueda en http://www.idealista.es
Por dedicar tiempo a tareas insignificantes.
Dedica tiempo de valor a la lectura de libros como éste y otros muchos. Hay libros que te pueden cambiar la vida. Como Padre Rico, Padre Pobre
O Mente millonaria. Por mencionar algunos de los recomendados aquí.